“El Consejo” – ¿Quién gobierna los Estados Unidos de América?

Introducción

"El Consejo" y todos y todo lo que emana de él han controlado los Estados Unidos durante los últimos cincuenta años con el propósito de extraer la riqueza de nuestra nación. El propósito de nuestro gobierno constitucional y de la fuerza laboral federal es proteger nuestra riqueza y el "bien público" del pueblo estadounidense. El propósito del "Consejo" es aplastarlo y destruirlo.

Utilizan las herramientas de las acusaciones, la obstrucción y las agencias gubernamentales que han convertido en armas para atacar a sus enemigos bajo un falso manto de legalidad. Son ellos los únicos que eligen quiénes serán los ganadores y los perdedores en la política, los negocios, la economía, los medios de comunicación, las elecciones y la educación, y lo hacen con total amoralidad.

Exponerlos por su nombre, su corrupción y sus medios de control, e identificar cómo desmantelar su poder ilegítimo es el primer paso en la restauración de los Estados Unidos de América como una república constitucional.

EL CONSEJO

(Los miembros actuales de "El Consejo" incluyen: el Inspector General de EE. UU. Michael Horowitz, el Director del FBI Christopher Wray, el Fiscal General de EE. UU. Merrick Garland, el Director de la Oficina de Responsabilidad Profesional (OPR) Jeffrey Ragsdale, el Jefe del Sector de Integridad Pública (PIN) Corey Amundson, la Fiscal General Adjunta Lisa Monaco, y el Primer Fiscal General Adjunto Principal Marshall Miller.)

El Consejo es una organización “intocable”, codificada legislativamente, sui generis [1]  con tentáculos incrustados en cada agencia y rama gubernamental, excepto la Corte Suprema de los Estados Unidos.

Desde su perspectiva, son dueños de los Estados Unidos de América. Es "suyo" y "ellos" son sus administradores autoproclamados. Cualquiera que "no sea ellos" es "idiota útil", "inocente útil" o bienes humanos que se pueden desechar en beneficio de la necropolítica. [2]  El resto de nosotros somos "unidades de carbono" prescindibles a las que se les asignan valores positivos y negativos según nuestra utilidad relativa para ellas. Ése es su lenguaje.