Mary Magdalene: The New World Channel: Octavia Vasile

Mary Magdalene: The New World

 

Channel: Octavia Vasile

Beloved children of the Light,

Everything unfolds as ordained from above. The world around you is changing. Leave behind what you already know. Stop repeating. Stop striving. Pause completely, so that the change may enter. You are the creators of the new Earth, yet the old patterns pull you backward. Break them gently. Simplify. Make the changes you already feel in your heart. And when nothing seems to move, stay still, for stillness allows the higher currents to reach you.

There are places beneath the skin of the Earth, sacred chambers of stone and root, where the vibration is at its highest. Go into these spaces to reconnect. In these depths your breath meets the heartbeat of the planet, and your soul rests in clarity. In silence you become whole again.

When thought rises and entangles you, speak softly to yourself: Everything happens effortlessly. Let this become the rhythm of your being. You are a vessel for the river of Spirit. Allow yourself to be carried.

Women of the Earth, I call especially to you. The ancient ley lines awaken once more, and with them the memory of the feminine current returns in power. The world needs your gentleness. Let softness guide your choices, for this is how you weave the new world into being. Your calm hands and tender words create more than any grand effort. In your gentleness, strength is reborn.

Simplify what surrounds you. Remove what distracts you. Let there be spaces for silence in your days and tenderness in your gatherings. Meet the old patterns with a quiet refusal. Choose devotion through rest, presence, and kindness.

Do not fear going underground, for in descent you rediscover the light you carry. In the still darkness you remember your soul’s map. And when you rise again, bring this remembrance into the daylight where it can shine for others.

Beloved ones, I bless you. May you pause often enough to hear the true instructions of your heart. May you release what no longer fits, and make room for the gentleness that wants to breathe through you. Remember always: everything happens effortlessly.

With eternal love,

Mary Magdalene

María Magdalena: El Nuevo Mundo

Canal: Octavia Vasile

Amados hijos de la Luz,

Todo se desarrolla según lo ordenado desde arriba.El mundo que te rodea está cambiando. Deja atrás lo que ya sabes. Deja de repetir. Deja de esforzarte. Haz una pausa completa para que el cambio entre. Son los creadores de la nueva Tierra, pero los viejos patrones los arrastran hacia atrás. Rómpelos con suavidad. Simplifica. Haz los cambios que ya sientes en tu corazón. Y cuando nada parezca moverse, quédate quieto, pues la quietud permite que las corrientes superiores te alcancen.

Hay lugares bajo la superficie de la Tierra, cámaras sagradas de piedra y raíz, donde la vibración alcanza su máximo esplendor. Adéntrate en estos espacios para reconectar. En estas profundidades, tu respiración se encuentra con el latido del planeta, y tu alma descansa en la claridad. En silencio, te recuperas.

Cuando el pensamiento surja y te atrape, dite suavemente: Todo sucede sin esfuerzo. Deja que esto se convierta en el ritmo de tu ser. Eres un recipiente para el río del Espíritu. Déjate llevar.

Mujeres de la Tierra, las invoco especialmente. Las antiguas líneas ley despiertan una vez más, y con ellas, la memoria de la corriente femenina regresa con fuerza. El mundo necesita su dulzura. Que la dulzura guíe sus decisiones, pues así es como forjan el nuevo mundo. Sus manos serenas y sus palabras tiernas crean más que cualquier gran esfuerzo. En su dulzura, renace la fuerza.

Simplifica lo que te rodea. Elimina lo que te distrae. Deja que haya espacios para el silencio en tus días y ternura en tus reuniones. Enfréntate a los viejos patrones con un rechazo silencioso. Elige la devoción a través del descanso, la presencia y la amabilidad.

No temas sumergirte en la oscuridad, pues al descender redescubres la luz que llevas dentro. En la quietud de la oscuridad, recuerdas el mapa de tu alma. Y al ascender, lleva este recuerdo a la luz del día, donde pueda brillar para los demás.

Amados, los bendigo. Que se detengan con frecuencia para escuchar las verdaderas instrucciones de su corazón. Que liberen lo que ya no les cabe y den paso a la dulzura que desea respirar a través de ustedes. Recuerden siempre: todo sucede sin esfuerzo.

Con amor eterno,

María Magdalen