Padre Absoluto – La Historia de la Humanidad (La Impulsividad del Alma) 12 de diciembre de 2025

Padre Absoluto – La Historia de la Humanidad (La Impulsividad del Alma)
12 de diciembre de 2025

Hola mis queridos y amados hijos!

Hoy me gustaría continuar nuestra discusión sobre cómo la reacción del Alma difiere de la reacción de la conciencia a las llamadas acciones humanas “morales”.

Muy a menudo, lo que se percibe como grosería desde el punto de vista de las reglas de etiqueta socialmente establecidas, el Alma puede verlo de manera muy diferente.

Muchas personas a veces necesitan “terapia de choque” para reconocer sus errores y dar un paso adelante en el camino del desarrollo espiritual, ya que los consejos suaves y delicados resultan ineficaces.

Su ego está tan convencido de su propia rectitud que sólo un comentario directo y agudo puede romper su “terquedad” (pero, por supuesto, si es constructivo).

Y a menudo, tal comentario proviene de un Alma pura y brillante, que intuitivamente siente que puede ayudar a otra Alma brillante en su camino espiritual.

Así, una declaración dura y poco halagadora no se origina en la mente consciente, sino que es un “grito” del Alma, deseándole el bien a la otra persona.

La mente consciente, por otro lado, puede “susurrar” que interferir en la vida de otra persona es de mala educación e indelicado, pero el Alma toma una decisión diferente, viendo todo más profundamente y multidimensionalmente.

Y ya no le importa cómo la otra persona percibe su impulso.

Lo que le importa es que ha cumplido su misión: ha intentado cambiar a alguien en quien ve potencial espiritual, pero que está profundamente inmerso en el mundo tridimensional.

Otro ejemplo de la “mala interpretación” de la moralidad entre la mente consciente y el Alma es el hábito bastante común de ayudar a los seres queridos en todo.

Desde tiempos inmemoriales esto se ha considerado una buena acción.

Esto es especialmente cierto en el caso de los niños, a quienes muchos padres tratan de guiar por la vida según sus propios puntos de vista, sin tener en cuenta su carácter ni sus intereses.

Este comportamiento está dictado por su conciencia, de acuerdo con tradiciones centenarias respecto a los niños.

Pero un Alma sabia y antigua es capaz de ir en contra de estas tradiciones y concederle a su hijo la libertad de decidir su propio destino, incluso si su visión del mundo y la de ellos difieren en algún modo.

La intuición les dice a estas personas que ésta es la única manera de poder mantener buenas relaciones con sus hijos, respetándolos como individuos independientes.

Y se podrían citar muchos ejemplos similares.

El factor principal aquí es el impulso que empuja al Alma de una persona a tomar una decisión particular o realizar una acción particular.

Si se basa en el deseo de no ofender a alguien, sino ayudarlo a encontrar su verdadero yo, entonces ya es un acto profundamente moral, incluso si no se ajusta a las reglas de comportamiento y moralidad generalmente aceptadas.

Pero no todos tienen el don de percibir esta fina línea y, por lo tanto, los esfuerzos de un Alma no siempre son percibidos adecuadamente por otra.

Como resultado, surge el resentimiento donde sería más apropiado la gratitud.

Nos detendremos aquí hoy.

El Padre Absoluto, que os ama inconmensurablemente, os ha hablado.

Canalizado por Marta el 12 de diciembre de 2025.

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